El conjunto dirigido por el argentino Edgardo Bauza, superó al Fluminense en el estadio Maracaná y logró ser el primer equipo ecuatoriano en conquistar la Copa Santander Libertadores
La Liga Universitaria de Quito sufrió más de la cuenta pero consiguió el festejo tan ansiado: ser campeón. Sin haber jugado mejor que su rival, logró empatar en el resultado global y definir el partido por penales, gracias a la actuación de su arquero, José Francisco Cevallos, quien atajó tres de los cuatro.
La noche estaba preparada para la fiesta carioca. Más de 90 mil personas llenaron el mítico estadio Maracaná y los pocos hinchas visitantes pasaban inadvertidos ante la multitud. La derrota que había sufrido el Fluminense en Ecuador por 4-2 preveía un comienzo de partido con el local en busca del descuento, sin embargo a los seis minutos Bolaños convertía para la Liga, tras centro de Guerrón, y enmudecía a los torcedores.
El último tiempo se jugó igual que el primero, con los dos equipos nerviosos y el cansancio como único protagonista. Todo transcurría sin sobresaltos y parecía que ambos equipos querían que finalice el partido para poder definir todo en los penales, sin embargo faltando cinco minutos, Bieler convertía un gol de cabeza que el árbitro argentino Héctor Baldassi, a instancias del juez de línea, anulaba. A un minuto de los penales Luiz Alberto recibió su segunda tarjeta amarilla, tras una falta a Guerrón, y tuvo que ver el final en el vestuario.
Desde los doce pasos, el equipo ecuatoriano consiguió anotar gracias a las ejecuciones de Urrutia, Salas y Guerrón, mientras que el disparo de Campos fue atajado por Fernando Henrique. Por el lado de Fluminense, el único que convirtió fue Cicero, mientras que los tiros del argentino Darío Conca, Thiago Neves y Washington fueron atajados por el arquero Cevallos.
Referencia
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=102697
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